top of page

Lekil’ vo’ ta sventa jlumaltik

Agua segura para nuestra comunidad
TESTIMONIO_NAGC.png

Las comunidades de la región Altos de Chiapas, comparten la misma experiencia de haber acarreado agua desde su infancia y vivir con la escasez.

 

José “E” originario del municipio de Chenalhò, relata que el agua que consumía  desde pequeño provenía de los pozos, y que al secarse durante la temporada de estiaje, tenían que madrugar para caminar y acarrear agua a sus hogares. Ahora ya hay pocas personas que caminan durante horas para ir por agua, pues las traen en camionetas. Aún así, el costo del transporte representa un gasto para las familias. 

“Los que más sufrían eran los alumnos ya que ellos bebían directamente de los tubos de captación de lluvia sin ningún tratamiento.”

En muchos de las comunidades de la región Altos, son varios los factores que no les permiten el acceso a agua segura, y comprensibles las condiciones materiales de las casas, que dificultan conservar el agua segura. Comúnmente, el agua es usada  y bebida tal como se encuentra, en el tanque de ferrocemento o tinaco, desde donde la acarrean a la casa o a la cocina en cubetas o cántaros. Una frase que se escucha con frecuencia entre los habitantes es: 

 

 

“cuando hay leña, se hierve el agua; cuando hay cloro se clora el agua¨.

 

Tomar agua de pozos y de lluvia sin hervir o tratarla es una práctica cotidiana. Los abuelos- abuelas de los tseltaltelik (forma plural equivalente a ‘tseltales’) tomaban el agua de donde la encontraban.

 

José, dice que poco a poco las prácticas han ido cambiando. Hace dos años que las autoridades informaron en una asamblea sobre el proyecto que Cántaro Azul había presentado para mejorar la calidad de vida, a través del acceso a agua segura. 


Menciona, que desde la instalación del Sistema de Agua Segura comunitario, se han reducido las enfermedades estomacales y se han fortalecido las redes comunitarias en torno a los servicios de agua.

 

Las redes comunitarias son A’telotik Swenta Yu’un  Ka’altik (“quienes trabajan para nuestra agua”), estructuras claves  y fundamentales, para asegurar la continuidad e impulsar el modelo de servicios de agua segura.

“Yo fui parte del comité del kiosco por un año, no conocía cómo era el sistema, y por eso no le tomaba importancia. Al llegar vi que el agua tiene mucha importancia y me gustó como se trata el agua con sus componentes que trae.”

A pesar de que las Redes estén convencidas del trabajo que se gesta en su comunidad, esto no asegura por sí sólo un resultado positivo y automático entre el resto de las familia. Ahora, el reto para la comunidad de José, es crear una red entubada que distribuya agua segura a los hogares que se encuentran lejos del sistema comunitario.

​

​

“Aunque vivo lejos, hago el esfuerzo de traer mi garrafón de agua porque me gusta beber agua tratada para mi salud.”

Las Redes hacen un trabajo muchas veces solidario, el cual resulta conflictivo en algunos momentos, pues quienes las integran se encuentran en la disyuntiva, de ir a trabajar para obtener ingreso familiares o ir a la reunión o capacitación, para el beneficio común de su localidad. 

​

En México no existe un registro formal de Redes Comunitaria de Agua, ni tampoco programas de apoyo para esas organizaciones. De ahí la importancia de reconocerlas e integrarlas a las políticas públicas.

​

Descubre de qué maneras puedes contribuir para fortalecer la participación de las Redes Comunitarias en la gobernanza del agua. 
bottom of page